En primer lugar, como su nombre indica son los suelos de hormigón que tiene un acabado texturizado por la estampación de los moldes.
El hormigón impreso, también llamado hormigón estampado, es el resultado de un proceso de estampado y texturizado que
actualmente gana muchos adeptos en el mundo.
Sobre todo, esto se debe a los acabados estéticos, acompañados de atractivos beneficios económicos.
Además, destaca por mantener intactas las propiedades más importantes del hormigón. Es decir, su resistencia y durabilidad, necesitando
un mantenimiento simple para garantizar su funcionabilidad en zonas de tráfico alto.
Su principal función es completamente estética, valiéndose de la plasticidad de la mezcla durante el proceso de fraguado.
Por otro lado, puede ser visto como proceso arquitectónico in situ, el cual consiste en la incorporación de texturas y colores en la superficie de pavimentos
rígidos.
Esencialmente para lograr el hormigón estampado se ha de extender el pigmento adecuado en la superficie fresca del hormigón. Para luego colocar
los moldes del estampado, que serán presionados contra el hormigón.
El acabado de la impresión tiende a estar definido por formas geométricas particulares o imitaciones de madera, piedra, ladrillos, baldosas, adoquines, etc.
¿QUE ES Y SUS CARACTERISTICAS?
Hormigón impreso como su nombre indica tiene como componente principal el hormigón.
Primero es necesario acondicionar la zona que se trata de echar la solera de hormigón.
Hablamos de alisar y compactar la superficie para tener un suelo firme.
Después se coloca una malla de acero y posteriormente verter el hormigón fresco.